Los días comenzaron a pasar hasta
convertirse en semanas y las semanas comenzaron a convertirse en meses. Octubre
llego, tan rápido que si no hubiera sido gracias a los calendarios, ni siquiera
me habría dado cuenta.
Varias cosas sucedieron en ese lapso de
casi tres meses:
1.- Aunque he querido tratar de salir con Adam, aun no me he decidido a hablar de eso con él. Desde aquel beso, meses atrás, el tema de salir entre nosotros no se ha tocado, ni por Adam, ni mucho menos por mí. Eso si, nuestra relación había crecido mucho.
2.- Harry y Karen le habían puesto fecha a su boda.
3.- Melanie y Dougie habían terminado, ya que Melanie tenía que irse del país por unos meses, y ambos preferían reanudar su relación cuando ella regresara.
4.- Tom y Emma ya eran oficialmente novios, y eso me ponía demasiado feliz.
5.- Adam y yo habíamos encontrado un departamento perfecto para mi, e iríamos a verlo pronto.
Y por ultimo, pero no por eso menos importante…
6.- Prácticamente esto es lo que más me deprimía, justo días después de mi cumpleaños, Danny y yo habíamos salido a comer, habíamos hablado de todo y de nada, ese mismo día habíamos acordado que pasara lo que pasara, seguiríamos teniendo la relación de antes, sin importar que el tuviera novia o yo llegara a tener pareja, él dijo que me quería y que no quería perder mi amistad, y bueno, creo que lo intentamos, pero después de ese día, solo nos vimos dos veces y todo siguió como antes, lamentablemente, ya pasaron tres meses y las cosas se enfriaron, nos alejamos un poco, y ya casi ni hablamos, solo de vez en cuando yo le llamo y el me llama, pero eso ya es demasiado raro que suceda… Y bueno, sobre su novia no quiero hablar, como dijo Mel el día en que todos la conocimos, a mi tampoco me da espina, y me preocupa que cambie al Danny que yo y yo todos conocemos.
1.- Aunque he querido tratar de salir con Adam, aun no me he decidido a hablar de eso con él. Desde aquel beso, meses atrás, el tema de salir entre nosotros no se ha tocado, ni por Adam, ni mucho menos por mí. Eso si, nuestra relación había crecido mucho.
2.- Harry y Karen le habían puesto fecha a su boda.
3.- Melanie y Dougie habían terminado, ya que Melanie tenía que irse del país por unos meses, y ambos preferían reanudar su relación cuando ella regresara.
4.- Tom y Emma ya eran oficialmente novios, y eso me ponía demasiado feliz.
5.- Adam y yo habíamos encontrado un departamento perfecto para mi, e iríamos a verlo pronto.
Y por ultimo, pero no por eso menos importante…
6.- Prácticamente esto es lo que más me deprimía, justo días después de mi cumpleaños, Danny y yo habíamos salido a comer, habíamos hablado de todo y de nada, ese mismo día habíamos acordado que pasara lo que pasara, seguiríamos teniendo la relación de antes, sin importar que el tuviera novia o yo llegara a tener pareja, él dijo que me quería y que no quería perder mi amistad, y bueno, creo que lo intentamos, pero después de ese día, solo nos vimos dos veces y todo siguió como antes, lamentablemente, ya pasaron tres meses y las cosas se enfriaron, nos alejamos un poco, y ya casi ni hablamos, solo de vez en cuando yo le llamo y el me llama, pero eso ya es demasiado raro que suceda… Y bueno, sobre su novia no quiero hablar, como dijo Mel el día en que todos la conocimos, a mi tampoco me da espina, y me preocupa que cambie al Danny que yo y yo todos conocemos.
Cerré con un golpe de cadera la puerta del
refrigerador, ya que tenía ocupadas ambas manos; en una sujetaba una taza de
café caliente, en la otra tenía un frasco de Nutella, mientras que con mi
cuello, sujetaba el teléfono inalámbrico, ya que estaba hablando con Emma.
—Si, Adam y yo iremos a verlo en un rato más. Aun esta durmiendo y no quiero despertarlo. Pero no se, Emma, si no me gusta el departamento, no sé que haré. — dije mientras colocaba todo lo que traía en mis manos, sobre la barra de la cocina, para después tomar el teléfono y masajear ligeramente mi cuello.
— ¿Cuál es la urgencia de irte de su casa? Por lo que se, Adam no te ha dicho que te vayas y te puedo apostar lo que quieras, a que no quiere que lo hagas, esta feliz contigo ahí. —Logre escuchar una risita del otro lado, lo que hizo que frunciera el ceño. No se podía con esta mujer.
—No, no me ha dicho nada, estoy de acuerdo, pero sabes que no me gusta ser una carga para nadie, no quiero vivir a su costa…
—Podrías pagarle algo…
—Se lo propuse y no acepto. —bufé, mientras dejaba mi pan con Nutella sobre el plato.
—Oh…—guardo silencio unos segundos para después volver a sacar sus conclusiones. —Al parecer si lo traes loco, mira que no dejarte pagar nada y llevar poco mas de tres meses viviendo ahí, wow, Sam, no cualquiera. —“si, Danny lo haría.” Pensé, para después sacudir mi cabeza y desechar tremenda tontería. No respondí a lo que Emma dijo. — Sam, al parecer te deje pensando en alguien cuyo nombre inicia con “D” y termina con “anny el amor de mi vida Jones”.
—Emma…—dije en tono cansino. Logre escuchar como comenzaba a caer agua del otro lado de la habitación, así que supuse que Adam ya se había despertado y estaba dándose una ducha, sentí como las mejillas se me coloreaban de rojo. ¿Qué pasaba?
—Ya se lo que me dirás, pero sabes que tengo la razón.
—Te odio. —dije.
—Como sea, yo a ti no. Mañana nos vemos en lo de Karen, por favor, no faltes.
—No lo hare. Te quiero y odio al mismo tiempo. Saluda a Tom de mi parte. —colgué el teléfono, pensando en la conversación que había tenido con Emma, me removí en mi asiento, mientras le daba un sorbo a mi taza de café ahora un tanto tibio. Perdí mi vista en un punto fijo.
—Si, Adam y yo iremos a verlo en un rato más. Aun esta durmiendo y no quiero despertarlo. Pero no se, Emma, si no me gusta el departamento, no sé que haré. — dije mientras colocaba todo lo que traía en mis manos, sobre la barra de la cocina, para después tomar el teléfono y masajear ligeramente mi cuello.
— ¿Cuál es la urgencia de irte de su casa? Por lo que se, Adam no te ha dicho que te vayas y te puedo apostar lo que quieras, a que no quiere que lo hagas, esta feliz contigo ahí. —Logre escuchar una risita del otro lado, lo que hizo que frunciera el ceño. No se podía con esta mujer.
—No, no me ha dicho nada, estoy de acuerdo, pero sabes que no me gusta ser una carga para nadie, no quiero vivir a su costa…
—Podrías pagarle algo…
—Se lo propuse y no acepto. —bufé, mientras dejaba mi pan con Nutella sobre el plato.
—Oh…—guardo silencio unos segundos para después volver a sacar sus conclusiones. —Al parecer si lo traes loco, mira que no dejarte pagar nada y llevar poco mas de tres meses viviendo ahí, wow, Sam, no cualquiera. —“si, Danny lo haría.” Pensé, para después sacudir mi cabeza y desechar tremenda tontería. No respondí a lo que Emma dijo. — Sam, al parecer te deje pensando en alguien cuyo nombre inicia con “D” y termina con “anny el amor de mi vida Jones”.
—Emma…—dije en tono cansino. Logre escuchar como comenzaba a caer agua del otro lado de la habitación, así que supuse que Adam ya se había despertado y estaba dándose una ducha, sentí como las mejillas se me coloreaban de rojo. ¿Qué pasaba?
—Ya se lo que me dirás, pero sabes que tengo la razón.
—Te odio. —dije.
—Como sea, yo a ti no. Mañana nos vemos en lo de Karen, por favor, no faltes.
—No lo hare. Te quiero y odio al mismo tiempo. Saluda a Tom de mi parte. —colgué el teléfono, pensando en la conversación que había tenido con Emma, me removí en mi asiento, mientras le daba un sorbo a mi taza de café ahora un tanto tibio. Perdí mi vista en un punto fijo.
De pronto, la cocina se inundo de un
delicioso aroma, perfume de hombre, amaba el perfume de hombre, era como una
droga, inhale y llene mis pulmones de aquel aroma. Después me gire y me percate
de que Adam había entrado a la cocina, lo mire fijamente, y pude sentir como mi
quijada se desencajaba y tocaba la barra de la cocina, se veía realmente guapo,
¿Cómo le hacia? Vestía unos jeans entubados color negro deslavado, una camisa a
cuadros color lila, verde y blanco, de botones al frente, y mangas tres cuartos
y mientras que un gorro tejido adornaba su cabello.
Se
Se
acercó a mí, yo aun seguía mirándolo fijamente, se inclino
y beso mi mejilla, lo cual hizo que me estremeciera y sintiera un cosquilleo en
mi cuerpo. El se separo y me sonrió.
—Buenos días. —dijo. Mientras yo sentía como de repente me sentía cohibida.
— ¿Cómo dormiste? —pregunte, mientras intentaba controlar el ligero temblor nervioso de mi voz.
—Perfecto, ¿y tu?
—Bien, gracias. —le sonreí. — ¿Quieres que te prepare algo de desayunar mas elaborado? —dije mientras veía como miraba a mis queridos panes embarrados de Nutella.
—No. —tomo el plato y lo alejo a un punto separado de mi. Yo fruncí el ceño confundida. —Nada de eso —señalo mi intento de desayuno con la cabeza— Hoy invitare yo el desayuno, ayer vi un lugar que me pareció lindo y me gustaría ir a probar a ver que tal esta y después de ahí, podemos ir a ver el departamento. ¿Qué dices? —dijo mostrándome una gran sonrisa.
—Creo que no estoy vestida como para ir a algún lugar a desayunar. —dije mirándome a mi misma. Llevaba unos shorts de mezclilla algo cortos, mis converse blancos y una blusa blanca algo holgada que dejaba ligeramente descubierto mi hombro derecho, el cabello lo llevaba sujetado en un chongo, algo desprolijo. La verdad, solo había agarrado lo primero que vi en mi armario.
—Yo creo que estas perfecta. —estiro su mano para que la tomara, así que después de unos segundos accedí y la tome, haciendo que bajara del taburete con un saltito.
—Siempre te sales con la tuya. —puse los ojos en blanco intentando parecer molesta, pero no pude, ya que una sonrisita apareció en mis labios. —Iré por mi celular y bolso.
Salí de la cocina y camine hacia mi habitación, no quería llevar mi bolso después de todo, así que metí algunos billetes en una de las bolsas de mi short, sin importar que se arrugaran, mientras en uno de los bolsillos traseros metía mi celular, me puse un poco de perfume y salí.
Al llegar a la sala, vi a Adam inclinado jugando con Winston, se veía adorable. Mi corazón se hincho de ternura. El elevo su mirada y se encontró con la mia, me guiño un ojo y yo me sonroje.
—Buenos días. —dijo. Mientras yo sentía como de repente me sentía cohibida.
— ¿Cómo dormiste? —pregunte, mientras intentaba controlar el ligero temblor nervioso de mi voz.
—Perfecto, ¿y tu?
—Bien, gracias. —le sonreí. — ¿Quieres que te prepare algo de desayunar mas elaborado? —dije mientras veía como miraba a mis queridos panes embarrados de Nutella.
—No. —tomo el plato y lo alejo a un punto separado de mi. Yo fruncí el ceño confundida. —Nada de eso —señalo mi intento de desayuno con la cabeza— Hoy invitare yo el desayuno, ayer vi un lugar que me pareció lindo y me gustaría ir a probar a ver que tal esta y después de ahí, podemos ir a ver el departamento. ¿Qué dices? —dijo mostrándome una gran sonrisa.
—Creo que no estoy vestida como para ir a algún lugar a desayunar. —dije mirándome a mi misma. Llevaba unos shorts de mezclilla algo cortos, mis converse blancos y una blusa blanca algo holgada que dejaba ligeramente descubierto mi hombro derecho, el cabello lo llevaba sujetado en un chongo, algo desprolijo. La verdad, solo había agarrado lo primero que vi en mi armario.
—Yo creo que estas perfecta. —estiro su mano para que la tomara, así que después de unos segundos accedí y la tome, haciendo que bajara del taburete con un saltito.
—Siempre te sales con la tuya. —puse los ojos en blanco intentando parecer molesta, pero no pude, ya que una sonrisita apareció en mis labios. —Iré por mi celular y bolso.
Salí de la cocina y camine hacia mi habitación, no quería llevar mi bolso después de todo, así que metí algunos billetes en una de las bolsas de mi short, sin importar que se arrugaran, mientras en uno de los bolsillos traseros metía mi celular, me puse un poco de perfume y salí.
Al llegar a la sala, vi a Adam inclinado jugando con Winston, se veía adorable. Mi corazón se hincho de ternura. El elevo su mirada y se encontró con la mia, me guiño un ojo y yo me sonroje.
***
El desayuno había estado fabuloso, el
restaurante era increíble, todo estilo vintage, de pronto era como si me
hubiera trasladado a 1864 donde las mujeres vestían vestidos amplios y pesados
y los hombres iban por ahí con trajes. Termine encantada y casi obligando a
Adam que regresáramos después.
Íbamos en camino hacia el departamento que
Adam había encontrado para mi, pero lo cierto es que me ponía nerviosa, ya que
por lo que veía, estaba demasiado cerca de donde veía Danny.
Adam detuvo el auto frente a unos edificios, así que supuse que ya habíamos llegado. Tenía 5 pisos, y según lo que había leído, cada piso contaba con 2 departamentos, así que era algo privado, lo que me gustaba.
Adam detuvo el auto frente a unos edificios, así que supuse que ya habíamos llegado. Tenía 5 pisos, y según lo que había leído, cada piso contaba con 2 departamentos, así que era algo privado, lo que me gustaba.
Al bajar del auto, Adam me tomo de la mano
y yo no me negué, así que yo igual, apreté la suya, mientras caminábamos hacia
un señor que le hacia una seña a Adam con la mano, supuse que él era quien nos
mostraría el lugar
—Bienvenidos, soy el señor Brooks. —nos ofreció su mano a modo de saludo y la tomamos, pero aun sin soltar la de nosotros. —Supongo que buscan un lugar donde comenzar su vida de pareja, así que creo que este departamento les encantara. — ¿Vida de pareja? Me puse roja, el creía que Adam y yo éramos novios, de pronto sentí la necesidad de separarme de él, y caminar sin tomar su mano, mala idea, ya que al momento en que separe su mano de la mía, era como si algo me faltara, así que rápidamente la tome de nuevo, mientras miraba nerviosa a Adam, quien me ofrecía una mirada extrañada, pero que a la vez me preguntaba si todo estaba bien, yo le sonreí y seguí mirando al Sr. Brooks. —Síganme por acá, por favor.
—Bienvenidos, soy el señor Brooks. —nos ofreció su mano a modo de saludo y la tomamos, pero aun sin soltar la de nosotros. —Supongo que buscan un lugar donde comenzar su vida de pareja, así que creo que este departamento les encantara. — ¿Vida de pareja? Me puse roja, el creía que Adam y yo éramos novios, de pronto sentí la necesidad de separarme de él, y caminar sin tomar su mano, mala idea, ya que al momento en que separe su mano de la mía, era como si algo me faltara, así que rápidamente la tome de nuevo, mientras miraba nerviosa a Adam, quien me ofrecía una mirada extrañada, pero que a la vez me preguntaba si todo estaba bien, yo le sonreí y seguí mirando al Sr. Brooks. —Síganme por acá, por favor.
La planta baja, tenía una pequeña
recepción, así que supuse que teníamos portero, eso me gusto. Llegamos a los
elevadores, y el Señor, presiono el numero 3. Subimos rápido, Adam me dejo
salir primero que el del elevador, caminamos tomados de la mano, por un largo
pasillo el cual estaba iluminado por un gran ventanal al fondo de este, y las
paredes eran de ladrillo, le daba un toque moderno y casual.
El señor Brooks, se detuvo frente a una puerta, que mostraba un seis a su costado. Supuse que este era el departamento en el que probablemente viviría. Abrió la puerta, lo cual sentí como una eternidad, se hizo a un lado para que Adam y yo entráramos y miramos el lugar con calma.
Se veía muy sencillo, tenía grandes ventanales, piso de madera, algunas paredes eran de ladrillo rojo, -como el pasillo- unas estaban pintadas de color gris, no tan obscuro, pero no tan claro, mientras que otras eran blancas, lo cual le proporcionaba algo de luminosidad al lugar. La cocina era de acero inoxidable, y tenia una barra al centro.
Solte la mano de Adam y comencé a caminar yo sola por el lugar, mientras el me seguía detrás. El departamento contaba con una habitación, y un estudio, -que podría convertir en otra habitación, si quisiera.- la que podría llegar a ser mi habitación tenia un baño completo, mientras un baño y medio, se encontraba cerca de la sala, la cual era de un tamaño perfecto. Entre a la habitación principal, era amplia, y contaba con una vista increíble a la calle, los armarios eran grandes y eso también me gustaba. Entre al baño, y vi que tenia una bañera, lo cual me hizo sonreir, podría pasar horas dentro relajándome.
Sali de la habitación y me percate de que Adam estaba hablando con el Sr. Brooks, ambos me miraron con una sonrisa, esperando mi decisión. Al acercarme a ellos, me percate de una puerta de cristal que estaba ahí, camine hacia allá, y me di cuenta de que daba a un balcón. Sinceramente, este lugar me había encantado.
— ¿Y bien? ¿Qué dices? —pregunto Adam mientras me ponía a su lado.
— ¿Cuándo nos mudamos? —dije a manera de respuesta. Adam soltó una carcajada y el Señor Brooks lo imito. Yo solo sonreí inocentemente.
El señor Brooks, se detuvo frente a una puerta, que mostraba un seis a su costado. Supuse que este era el departamento en el que probablemente viviría. Abrió la puerta, lo cual sentí como una eternidad, se hizo a un lado para que Adam y yo entráramos y miramos el lugar con calma.
Se veía muy sencillo, tenía grandes ventanales, piso de madera, algunas paredes eran de ladrillo rojo, -como el pasillo- unas estaban pintadas de color gris, no tan obscuro, pero no tan claro, mientras que otras eran blancas, lo cual le proporcionaba algo de luminosidad al lugar. La cocina era de acero inoxidable, y tenia una barra al centro.
Solte la mano de Adam y comencé a caminar yo sola por el lugar, mientras el me seguía detrás. El departamento contaba con una habitación, y un estudio, -que podría convertir en otra habitación, si quisiera.- la que podría llegar a ser mi habitación tenia un baño completo, mientras un baño y medio, se encontraba cerca de la sala, la cual era de un tamaño perfecto. Entre a la habitación principal, era amplia, y contaba con una vista increíble a la calle, los armarios eran grandes y eso también me gustaba. Entre al baño, y vi que tenia una bañera, lo cual me hizo sonreir, podría pasar horas dentro relajándome.
Sali de la habitación y me percate de que Adam estaba hablando con el Sr. Brooks, ambos me miraron con una sonrisa, esperando mi decisión. Al acercarme a ellos, me percate de una puerta de cristal que estaba ahí, camine hacia allá, y me di cuenta de que daba a un balcón. Sinceramente, este lugar me había encantado.
— ¿Y bien? ¿Qué dices? —pregunto Adam mientras me ponía a su lado.
— ¿Cuándo nos mudamos? —dije a manera de respuesta. Adam soltó una carcajada y el Señor Brooks lo imito. Yo solo sonreí inocentemente.
No podría creer que después de todos estos meses,
ya viviría sola, y ahora si, tranquila. Sin tener que preocuparme del animo de
Ken, sin tener que preocuparme de si podía o no invitar a mis amigos a mi casa.
Me emocionaba el hecho de que este seria mi hogar, y que podía acomodarlo como
quisiera. Moría por ir de compras.
Alce mi cabeza y le sonreí a Adam, el seguía hablando con el vendedor, al percatarse de que lo observaba, me miro fijamente, sonriéndome igual, mientras pasaba un brazo sobre mis hombros y me acercaba a él.
Suspire feliz, haciendo que me sorprendiera a mi misma.
-----------------------------------------------------------------------------------
No me convenció al 100% pero espero les guste, y perdón si les aburrió, pero tenia que escribir todo esto. en fin, yo se que dije que les iba a subir el fin de semana pasado, pero el sábado estaba escribiendo y tuve que salirme en la noche, ya que mi hermana se puso mal y tuvieron que llevarla al hospital, y no me dormí hasta las 5 am, el domingo trabaje -como muchas saben- y llegue muerta en la noche, y toda esta semana he estado trabajando igual, hasta ahorita pude terminar el capitulo y así, estoy escribiendo el siguiente.
espero sus comentarios y likes, 15+.
Las quiero!
Yanan.
Alce mi cabeza y le sonreí a Adam, el seguía hablando con el vendedor, al percatarse de que lo observaba, me miro fijamente, sonriéndome igual, mientras pasaba un brazo sobre mis hombros y me acercaba a él.
Suspire feliz, haciendo que me sorprendiera a mi misma.
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No me convenció al 100% pero espero les guste, y perdón si les aburrió, pero tenia que escribir todo esto. en fin, yo se que dije que les iba a subir el fin de semana pasado, pero el sábado estaba escribiendo y tuve que salirme en la noche, ya que mi hermana se puso mal y tuvieron que llevarla al hospital, y no me dormí hasta las 5 am, el domingo trabaje -como muchas saben- y llegue muerta en la noche, y toda esta semana he estado trabajando igual, hasta ahorita pude terminar el capitulo y así, estoy escribiendo el siguiente.
espero sus comentarios y likes, 15+.
Las quiero!
Yanan.